Ojos Bien Abiertos

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lunes, 7 de septiembre de 2015

MOMENTO CLAVE EN LA MANIPULACION MUNDIAL.


Desde 1921 casi cada Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica ha sido un miembro del CFR (Council on Foreign Relations) junto con la mayoría de los principales puestos del gobierno, incluyendo la mayoría de los embajadores estadounidenses alrededor del mundo.

El CFR también incluye a propietarios de medios de comunicación, periodistas y editores clave, educadores, líderes militares, y la lista sigue sin parar.

Éstos se interconectan con las sociedades secretas más importantes e influyentes, tales como La Orden de los Caballeros de San Juan de Jerusalén (Malta), la red controlada por el monarca británico; los francmasones, los Rosacruces, y la Mesa Redonda; la red de "fundaciones" estadounidenses como la Fundación Rockefeller y una telaraña interminable de grupos interconectados operando en última instancia para el mismo liderazgo mundial.

Esta red estaba abarcando el mundo por la década de 1930 y la Hermandad de la Élite estaba lista para su proyecto hasta el momento, la Segunda Guerra Mundial.
Fue un esfuerzo para lograr aún más centralización del poder y la creación de un cuerpo global que podía ser desarrollado en un gobierno mundial. Conocemos ese cuerpo hoy como las Naciones Unidas.

Con la economía alemana destrozada y la inflación corriendo de a miles por ciento, las personas alemanas vieron a Adolf Hitler como su salvador.

Los Nazis fueron financiados desde Wall Street y la Ciudad de Londres. Esto fue hecho vía las filiales alemanas de compañías británicas y estadounidenses y préstamos estadounidenses conocidos como el Plan Young y el Plan Dawes.
Estos préstamos se suponía que estaban ayudando a Alemania para que pague la indemnización, pero de hecho entraron derecho en la maquinaria de guerra de Hitler.
Standard Oil (los Rockefellers) e I. G. Farben, el cartel químico alemán que dirigió el campo de concentración en Auschwitz, eran, en efecto, la misma compañía.

Hitler llegó al poder en 1933 y en ese mismo año, no es coincidencia, Franklin Delano Roosevelt se hizo Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica. Su ruta al poder fue la misma que la de Hitler.

En 1929, los banqueros de la Hermandad colapsaron el mercado de valores del Wall Street y causaron la Gran Depresión. De este problema vino la solución, el paquete económico "New Deal" (Nuevo Trato) brindado por Roosevelt, quien ganó la elección presidencial de 1933.
Este "New Deal" era una réplica del paquete económico ofrecido por Hitler a las personas alemanas para solucionar sus problemas económicos manufacturados.

Cuando llegó al poder, Roosevelt perpetró uno de los mayores robos en la Historia humana cuando aprobó leyes que forzaban a las personas estadounidenses a que entregaran todo su oro al gobierno a cambio de inútiles trozos de papel conocidos como “billetes de banco” de la Reserva Federal. Esto era necesario, dijo, para solucionar los graves problemas económicos.

Pronto después, con la economía estadounidense ahora totalmente bajo el control de la Hermandad, Roosevelt puso su símbolo, la pirámide y el ojo que todo lo ve, sobre el billete de un dólar. Estaba diciendo a las personas estadounidenses: "Está hecho".

D.V.I.

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